In Memoriam
Desgraciadamente este domingo 29 de abril, ha fallecido Félix Alcocer Polo. Los más jóvenes no llegasteis a conocerlo. Félix era jugador y, sobre todo, amante de nuestro deporte. Él era el más veterano de los que bajamos los domingos a El Soto, a seguir jugando las pachangas matutinas.
Para los que hemos tenido la suerte de conocerle, podemos afirmar que era un placer compartir “pachanga” con él. De su parte no partió mal gesto para nadie, nunca censuró la participación de ninguno. Félix fue un auténtico señor.
Descasa en paz amigo.
Que la vida iba en serio
uno lo empieza a comprender más tarde.
Como todos los jóvenes, yo vine
a llevarme la vida por delante.
Dejar huella quería
y marcharme entre aplausos.
Envejecer, morir, era tan solo
las dimensiones del teatro.
Pero ha pasado el tiempo
y la verdad desagradable asoma.
Envejecer, morir,
es el único argumento de la obra.
Jaime Gil de Biedma
Instantánea de un muy apasionado del Baloncesto, pero sobre todo de una muy buena persona. El último partido de Baloncesto que vio fue el triunfo de "su Real Madrid" haciéndose con la Copa del Rey, tras 19 años sin conseguirlo.
Adjuntamos la fotografía del homenaje que le brindó la ABM unos días antes de que perdiera su “último partido”, contra ese implacable “rival” llamado Cáncer.
Sus compañeros homenajeados sujetando la camiseta firmada por todos para Félix.
La camiseta y este Trofeo Homenaje fueron entregados a su viuda María Jesús por sus compañeros y amigos.
Un lujo de persona.
Yo he tenido el placer de compartir cancha y balón con Félix en El Soto y me ha parecido una excelente persona, durante el juego y fuera de él. Para mí, ha dejado un mensaje con su forma de ser, de lo que debe ser un caballero. A ver si esta sensación de respeto por las personas, conseguimos transmitirla a las futuras generaciones. Mi más sentido pésame a la familia.
FELIX ALCOCER MI GRAN AMIGO
Gracias a la Junta Directiva de la ABM, por permitirme escribir unas líneas en memoria de mi gran amigo Félix.
Conocí a Félix, a la edad de 14 años, el venía de su Cuenca, estudiamos la misma profesión, y desde el primer día la empatía fue total, éramos dos locos del Baloncesto, jugamos siempre en los mismos equipos, juveniles, júnior, senior, – creamos nuestras jugadas, para saber donde pasarnos – sobre todo “la abuela”- así toda la vida, el baloncesto y la amistad, nos unió para siempre
Conocimos a nuestras novias, compramos nuestros pisos en Alcorcón y Móstoles, compartimos muchas tardes y noches de diversión, en su casa, en la mía, muchas complicidades, compartimos buenos y malos momentos, los cuatro nos fuimos muchos años juntos de vacaciones, compartiendo coche, tienda de campaña, que grandes vacaciones pasamos, recorriendo todo el norte de España ¡nunca las he olvidado!, tuvimos nuestros hijos, y siempre el baloncesto, nuestra locura y pasión ¡cuántas tardes jugábamos los dos solos en el Soto!, hasta la luz de las ventanas de la piscina aprovechábamos para seguir jugando ¡y la de leña que nos dábamos!
Hace sólo 33 años, que empezamos a bajar los domingos a jugar al Soto, creamos mucha afición – cuántas generaciones de jugadores hemos conocido – muchos amigos, ¡que mañanas más felices pasamos, hasta con el brazo derecho escayolado bajaba a jugar, y siempre el baloncesto, era quién nos unía a todos los apasionados al baloncesto, – aún con nuestras pequeñas discusiones, que si era personal, que si no…, vamos lo que es E L B A L O N C E S T O
”Ricardito“, me decía Félix, los domingos cuando nos veíamos en el Soto, ¡que estás ya muy mayor, para jugar con los jóvenes, déjalo ya – el jugaba las pachanguitas de los domingos y alguna entre semana, hasta que la maldita y cruel enfermad, empezó a fastidiarle, pero era muy fuerte, y aún recibiendo sesiones de quimio, seguía haciendo deporte, corría, montaba en bici, iba al gimnasio, se negaba a que la enfermedad le derrotase, el verano pasado bajó dos domingos a los Rosales a jugar – que alegría me dio y nos dio a todos los que le queríamos -, sabíamos lo mal que lo estaba pasando, pero él nos animaba, contándonos sus recuperaciones, su fuerza para hacer deporte, era muy pero que muy duro, ¡cuántos partidos jugamos en malas condiciones!, pero nunca dejábamos a nuestros equipos sin nuestra participación.
Félix, era mi gran amigo, nuestro gran amigo, una grandísima persona, muy comunicativo, al que siempre todos quisimos mucho, era exquisito en el trato, no tenía malas palabras, y si se enfadaba, o daba un buen palo, enseguida se disculpaba, un ejemplo, y sobre todo una grandísima persona.
Félix, recordando a un poeta que no gusta a los dos, decirte “QUE SIENTO MÁS TU MUERTE QUE MI VIDA”.
FÉLIX, EL DOMINGO A LAS 9, NOS VEMOS EN EL SOTO ” VIVA LA ABUELA “, TE ESPERO
Tu gran amigo Ricardito, que jamás te olvidará.
Fdo. Ricardo Zamora Sanz
Desde que empecé a jugar siempre tuvo palabras de ánimo conmigo.
No te olvidaré.
Para mi es más que un amigo, era como segundo padre, yo le conocí gracias al Baloncesto durante mi primer trabajo, que me permitía tiempo libre de sobra compartimos tardes y tardes en el soto , siempre tenia un buen consejo. Nunca le vi ni una mala palabra o gesto, y siempre estaba pendiente de ti, durante estos últimos meses que he estado sin trabajo es el único que me llamaba para animarme y ofrecerme todos sus contactos para procurarme trabajo.
SIEMPRE TE LLEVARE EN MI CORAZÓN.
Cuando en 1985 comenzé a bajar a El Soto los domingos por la mañana tuve la gran fortuna de conocer a un grupo diferente de personas. Nunca lo he comentado, pero tuve una experiencia muy negativa, que me obligó a cambiar de compañías. Estaba sólo y, la verdad, no tenía ni pajolera idea de jugar al basket, no manejaba la pelota, no sabía tirar (tampoco he mejorado gran cosa), cada pase que intentaba era un balón perdido, mi defensa era falta tras falta (Pedro me apodó Estopa por ello). La mayoría de los jugones evitaban compartir pachanga conmigo, pero Félix me acogía sin problemas, él nunca me reprochó nada, aunque perdiéramos por mis errores, de su boca sólo partían consejos, aportándome seguridad.
¡Gracias Félix! y ¡Gracias Chicos! Es un lujo haberos conocido.
Coincido con vuestra valoración y con vuestros comentarios. Recuerdo a Félix perenne en El Soto. Estaba siempre los domingos por la mañana, en la única pista con aquellos aros sin sujección lateral que eran más malos que el sebo. Lo más gracioso era que mientras el Abuelo intentaba acojonarnos a los jovencitos con sus gritos y sus palos, Félix hacía el papel de poli bueno, para que la cosa nunca llegara a mayores. También, como dice Manolo, lo recuerdo perfectamente por las tardes, cuando muchos de nosotros hacíamos pellas en el Manuel de Falla para jugar al baloncesto, allí también estaba él para echar unas canastas a cualquier hora y con cualquiera. Como bien ha explicado Ángel, jamás despreció a nadie ni como compañero ni como rival. Nunca le vi un mal gesto ni en la cancha ni fuera de ella, en ambos sitios tenía buenas palabras y buenos consejos para todos. Le perdí la pista cuando comencé a vivir en Estados Unidos, como a casi todos, pero en los últimos años habíamos vuelto a coincidir en verano algunos domingos. No sabía de su enfermedad así que cuando Álex me lo comentó ayer en Facebook me quedé helado. El tópico de que siempre se nos marchan los buenos es hoy más real que nunca. Hasta siempre, Félix, ha sido un placer compartir pachangas contigo; y lo seguirá siendo, porque siempre estarás con nosotros en El Soto, siempre habrá algo que nos recuerde a ti en esas canchas, aunque sea un triple a tablero sin apuntar.
La verdad es que siempre recordare a Félix como un señor, tanto dentro como fuera de la cancha. Nunca le vi una mala palabra con nadie ….al reves siempre daba animos y calmaba las pequeñas disputas que podían aparecer. Para mi un señor, Desde aquí mi más sincero pesame a la familia.
Este fin de semana podríamos hacer un minuto de silencio en la liga municipal. Que os parece????
Saludos
Nos parece una fenomenal idea. Que menos que un minuto de silencio. Lo vamos a intentar.
yo conoci a felix a traves de mi hermano pero puedo decir que era uno de mis mejores amigos.un tipo alegre y jovial a la vez que buena persona.jamas olvidare a un tipo como felix,de echo no he podido jugar al fronton tovdavia que era el deporte que compartiamos algunos sabados,su recuerfo me dobla las canillas.jamas te olvidare amigo este verano subire a lo mas alto de sierra cabrera que tu y mi hermano conociais en homenaje a ti.estoy seguro que nos estaras viendo dar pedales y jugar al fronton desde donde estes descanse en paz.
FELIX…. un compañero de pachangas.
A lo largo de mi vida he conocido a tres Félix y los tres ya no están. Los tres eran personas entrañables y los tres merecieron mis sinceras lágrimas al irse de este mundo. Uno no hace falta decir quien es, el amigo de los animales. Otro fue mi tío, hermano de mi madre y el último ha sido un compañero de pachangas de baloncesto….sé que suena trivial, ya ves que cosa pero no es así, que va, ni mucho menos. El que lleva el basket dentro, lleva a su gente dentro y lo que estáis leyendo es la muestra.
En el año 80, que aterrizó mi familia en Móstoles , busqué donde jugar pachangas pero el panorama era oscuro. Fue un domingo, que acabé en el Soto, vistiendo por cierto una camiseta de la universidad de mi hermano y allí estaban Manolo, Dúdu, Mikel, Richard, Pedro, Ricardo……y Félix, con su inseparable rodillera, para dar por terminada mi búsqueda y de paso ponerme mi apodo. Feliz encuentro que se repitió muchos domingos de muchos, muchos años por la mañana a las nueve, hiciera sol, frío, con el campo con charcos o bajo un sol de justicia……. y si no podía ser en el Soto, porque alquilaban las pistas a los del futbol sala , cogíamos los coches y al Municipal de Villaviciosa o a jugártela saltando la valla del colegio de turno o el instituto del Soto . No…nada que ver con la actualidad, que tenemos esta esplendida liga, esta asociación con su cobertura de torneos, internet y hasta un pabellón cubierto para entrenar todo el año….no, nada de nada que ver.
Pero hablemos de uno de ellos, de uno de los principales, amigo inseparable de Ricardo y excelente base. Félix de los que siempre querías que te tocase en tu equipo, porque si era al contrario, seguro que te acababa cayendo un triple desde un lateral y al tablero como a él le gustaba o….. cuantas veces intentaba taponarle una entrada a canasta ( 1.90 contra 1.67 más o menos) y me soltaba una bandeja en el último salto con cualquier mano que nunca he llegado a saber si era por debajo de mi axila, por detrás de mi espalda o zumbándome la oreja….lo único que sé es que me quedaba flipado pensando en la invisible trayectoria y con una canasta en contra. Nunca le ví una mala reacción a una falta, siempre señorial, educado, sonriente….. resumiendo…bajar y encontrarlo allí, jugando era sinónimo de una buena pachanga, de buenos momentos de baloncesto.
Me fui a vivir a Gijón 4 años y cuando venía a Madrid a ver a la familia, si era domingo y podía, bajaba al Soto a saludar a la gente y recordar viejos tiempos disfrutando del basket que tanto echaba de menos en tierras asturianas (donde la pasión es el futbol) y donde alguna vez coincidí con él….. Ya de vuelta en Madrid, el año pasado, vi a Félix en una pachanga veraniega de los Rosales, donde jugó, pero se fue pronto porque ya tenía la enfermedad aunque yo no lo supe entonces. En el All Star de este año cuando a la entrega del trofeo a los veteranos del Soto pregunté por él y Ricardo me dijo que estaba muy malito, sentí una mezcla de incredulidad y amargura. Sientes que el destino se lleva a alguien de tu equipo… de tu equipo de los domingos por la mañana a las nueve en el Soto.
Este hombre representa lo mejor para los que nos gusta el baloncesto y se merece ser un símbolo en nuestro mundillo.
Ojala haya canastas en el cielo.
Minas